Derecho a la información y libertad de expresión

Las reformas en materia de derecho a la información y a la libertad de expresión, dieron paso a una sociedad más democrática en México.

Derechos reconocidos no solamente por la Constitución sino en convenciones internacionales y por la jurisprudencia de la corte interamericana de derechos humanos.

Así lo señaló Armando Martínez, director jurídico corporativo de Televisa.

“Son derechos plenamente explorados y conocidos en el ambiente académico y en el ambiente judicial así como en el legislativo de todos los países latinoamericanos, en Europa obviamente hay gran desarrollo en materia de derecho a la información y en temas de libertad de expresión así como en los Estados Unidos”.

Los conceptos de éstos derechos a nivel internacional, dijo, son similares a los que reconoce la Suprema Corte en México.

“Creo sin embargo que a nivel de la sociedad es necesario que se genere más conciencia de la importancia de los mismos, de la importancia de dos derechos que obviamente tienen una contribución muy significativa en lo que es la vida democrática de nuestro país”.

Afirmó que en la medida que se tiene mayor información, menor censura y una mayor autorregulación de los medios existe un mayor flujo de información que permite a la sociedad ejercer mejor sus derechos.

Sociedad que requiere información inmediata lo que, aseguró, pone un mayor grado de complejidad y compromiso a los informadores.

Armando Martínez participó en el Diplomado sobre competencia económica y telecomunicaciones que organiza el Instituto de la Judicatura Federal.

Emmanuel Saldaña

 

Nuevo juicio de amparo

Humberto Suárez, magistrado de circuito, explicó que en la reforma constitucional en materia de amparo y su nueva Ley reglamentaria hay  muchos obstáculos para el acceso ciudadano a la justicia respecto de ciertos poderes públicos.

Esto, señaló, queda evidenciado, en particular, con el incremento de las causales de improcedencia en la nueva ley.

“En el caso de los poderes públicos vemos restricciones constitucionales, legales, para acceder al control constitucional… Esto del acceso a la justicia es algo que se pone en entredicho”.

Dentro del Diplomado del nuevo juicio de amparo, subrayó que la nueva ley establece 23 causales de improcedencia.

Las causales de improcedencia son los obstáculos para que se examine el fondo de un asunto, que impiden hacer un pronunciamiento al juez para decidir sobre la constitucionalidad de una norma.

Son descritas en el capítulo VII, artículo 61 de la nueva Ley de amparo.

Llamó al análisis de las primeras cuatro causales.

“Esas cuatro causales obedecen a la vinculación que tiene el acto reclamado con la procedencia del juicio de amparo basadas en una restitución material”.

En la siguiente sesión del Diplomado del nuevo juicio de amparo se abordará el tema de la sentencia: la publicidad, contenido y requisitos, suplencia de la queja, pruebas, efectos y aclaración.

Mario López Peña

Protección internacional de la persona humana

Dentro del Diplomado de derechos humanos en el Poder Judicial de la Federación, se analizaron las tres vertientes de la protección internacional de la persona humana.

“La primera de ellas más conocida para todos nosotros, quizá de más cercanía y de gran empuje dentro del Poder Judicial Federal y dentro de otros esfuerzos digamos derivados de la reforma de 2011 es el de la Protección Internacional de los Derechos Humanos”, Miguel Rábado Dorbecker, Profesor Departamento de Derecho Universidad Iberoamericana.

Se refirió a los casos en los que los derechos pueden ser restringidos.

“En un conflicto armado interno no pueden restringir todos los derechos y si restringes un derecho tienes que tener una justificación, una proporcionalidad para hacerlo, obviamente el derecho de libre tránsito es uno de los candidatos más claros a ser restringido”.

Explicó que estos derechos pueden ser restringidos incluso en catástrofes naturales.

Las otras dos vertientes de la protección internacional de la persona humana son el derecho internacional de los refugiados y el derecho internacional humanitario.

El especialista señaló que en estas dos ramas del derecho internacional no hay buenas noticias, en varias regiones del mundo.

“Hay cada vez más una restricción en materia de aceptación del estatuto de refugiados en diferentes países… Estamos en contextos en que muchos Estados entre ellos Estados Unidos, el Reino Unido, Francia llevan a cabo operaciones militares sin autorización del Consejo de Seguridad, con supuestamente una argumentación de ataque preventivo”.

El Diplomado en derechos humanos se realiza en el Instituto de la Judicatura Federal.

Juan Carlos González

Diplomado sobre litigación en el proceso penal

El éxito del nuevo sistema de justicia penal, que deberá estar vigente a más tardar en el 2016, depende de una adecuada capacitación de los operadores del mismo.

Afirmó el juez de garantías de Santiago de Chile, Fernando Guzmán Fuenzalida, quien añadió que si el sistema funciona bien, los beneficios sociales serán relevantes.

En principio, permitirá utilizar de mejor manera los recursos públicos, pues la idea es, que solo los casos relevantes lleguen a juicio, y el resto se resuelvan a través de medios alternos.

“Pero que son medidas que son mucho más beneficioso socialmente, que la imposición de una cárcel, que el recurso cárcel, mejor dicho, cierto que es la prisión, de tal forma de que en este tipo de procesos tenemos salidas alternativas como la suspensión condicional del procedimiento, los acuerdos reparatorios y también tenemos los procedimientos de auto incriminación, procedimiento simplificado o abreviado”.

Proceso que además, en todo momento protege el debido proceso y el respeto a los derechos tanto de la víctima como del inculpado.

“Es que vamos a tener un proceso penal que es mucho más respetuoso de los derechos fundamentales, es decir, un proceso penal solamente legítimo, cierto, en la medida en que no vulnera los derechos humanos y por lo tanto un proceso de esta naturaleza, garantiza de mejor forma todos los principios, cierto, a través de los cuales se protejan los derechos individuales”.

El juez Guzmán Fuenzalida, participó en el Diplomado sobre litigación en el proceso penal, que se imparte en el Instituto de la Judicatura Federal, en donde abordó el tema del papel que juegan los jueces de control y de la importancia de la prueba legítima en el proceso.

“Controlar la actuación del ministerio público, admitiendo o no, los medios de prueba que pueden ser recibidos en juicio”.

En este diplomado se encuentran inscritos 38 integrantes del Poder Judicial Federal, el cual culmina el próximo mes de enero.

José Luis Guerra García

Plaza de la Constitución, espacio público más importante de México

Es el espacio público más importante del país.

Lugar donde se fundó un imperio y corazón de un pueblo que cumple 203 años de vida independiente.

La Plaza de la Constitución tuvo sus orígenes en la fundación de México-Tenochtitlan, hace 688 años.

Ahí se estableció el centro político y religioso de los mexicas.

A esta gran plaza prehispánica llegaban los tributos y mercancías de toda la región del gran valle, que abarcaba cinco lagos.

En 1521 la gran Tenochtitlan cayó en manos de los españoles, quienes destruyeron el Templo Mayor.

En 1524, los constructores españoles utilizaron las piedras del recinto prehispánico para iniciar la construcción de la nueva plaza española.

Posteriormente, se erigieron  alrededor de la plaza los edificios del poder político, religioso y comercial de la Nueva España:

La Catedral, el Palacio del Virrey, hoy Palacio Nacional, y el Portal de Mercaderes.

Durante la época de La Colonia, la plaza mayor sufrió varias modificaciones.

Fue en 1813 cuando recibió el nombre oficial que tiene hasta la fecha: Plaza de la Constitución, porque ahí se juró la Constitución de Cádiz.

En 1842 el presidente Antonio López de Santa Anna ordenó despejar la plaza para construir un monumento a la independencia.

Una estructura similar a la que posteriormente se construyó en la avenida reforma, pero únicamente se construyó el primer basamento o zócalo, que permaneció por más de 20 años.

Por esa razón, la gente de la época se acostumbró a llamarle Zócalo a la Plaza de la Constitución y se quedó así como su segundo nombre.

Desde esa época se constituyó como el principal espacio para festejos, desfiles y acontecimientos importantes del país.

A finales del siglo XIX la Plaza de la Constitución o Zócalo lució un nuevo rostro.

Se instalaron jardineras, un kiosco y varias fuentes que años después fueron retiradas.

Fue en 1958, durante el gobierno de Ernesto P. Uruchurtu, cuando la Plaza de la Constitución adquirió el aspecto que conserva hasta nuestros días:

Una plancha de concreto de 46 mil 800 metros cuadrados, con una asta bandera al centro.

Se ubica entre las plazas más grandes e importantes del mundo.

Espacio emblemático que cada 15 de septiembre es escenario de la celebración más importante de nuestro país.

Juan  Carlos González

11 años después de que inició la lucha de Independencia se celebró por primera vez el Grito de Dolores

Voces y sentimientos de pertenencia a una nación.

Un llamado que instó a la rebelión de los párrocos contra el Virreinato de la Nueva España.

Se hizo a toda la población de Dolores, la madrugada del 16 de septiembre de 1810, Día de la Independencia de México.

Ahí pronuncia un discurso que termina con las palabras: “Viva la Virgen de Guadalupe, viva la América española, viva Fernando Séptimo y  Viva México”.

El lugar en el que se protagonizaron los hechos, hoy es Dolores Hidalgo, Guanajuato.

La primera vez que el Grito de Dolores se festejó fue en el Chapitel, una edificación en Huichapan, Hidalgo, en 1821, por el general Ignacio López Rayón y Andrés Quintana Roo.

En la actualidad la Campana de Dolores se encuentra en la alta cornisa del balcón presidencial de Palacio Nacional.

En conmemoración del aniversario del inicio del proceso independentista mexicano, proclamando vivas a la patria, cada 15 de septiembre el presidente en turno la hace sonar.

Oscar González

Desfile Militar 2013

Desfile Militar 2013

Desfile Militar 2013

El Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas, Enrique Peña Nieto encabezó el Desfile Militar conmemorativo a los 203 años de la Independencia de México y el Centenario del Ejército Nacional.

Acompañado por el Ministro Presidente de la Suprema Corte, Juan Silva Meza, los presidentes de las cámaras en el Congreso y los secretarios de la Defensa y Marina, izó la bandera en el Zócalo de la Ciudad de México.

Pasó revista a las tropas para dar inicio así al tradicional desfile.

Naves de la Fuerza Aérea mexicana se dieron paso por el cielo de la Ciudad de México.

Aún con la llovizna y el difícil acceso, cientos de capitalinos y visitantes se dieron cita para presenciar a los contingentes de la Armada de México, Fuerza Aérea, Policía Federal, Enfermería y Caballería, entre otros.

Algunos llegaron desde muy temprano para ocupar un lugar hasta adelante.

2 mil 600 mujeres del Ejército y la Marina desfilaron.

Así como 456 militares de 18 países, como Estados Unidos, Rusia, China, Brasil y Colombia.

El recorrido fue desde el Zócalo hasta el Auditorio Nacional.

Los paracaidistas se abrieron paso entre las nubes  para arribar a la plancha del Zócalo.

El parte militar:

La presencia de 19 mil 051 elementos del Ejército Mexicano, Armada de México, Fuerza Aérea, Policía Federal, Asociación Nacional de Charros y Federación Mexicana de Charrería, con armamento, material y vehículos terrestres y aéreos.

En el Desfile Militar que duró más de dos horas, no se reportaron incidentes.

Martha Rodríguez

Primer desfile del México independiente, se realizó el 27 de septiembre de 1821

El primer desfile en el México independiente, se realizó el 27 de septiembre de 1821, con motivo de la histórica entrada del Ejército Trigarante a la Ciudad de México, comandado por Agustín de Iturbide al frente de 16 mil jinetes.

Fue Porfirio Díaz quien cambió la fecha del desfile del Ejército, al 16 de septiembre, porque asoció el festejo del inicio de la Independencia con su onomástico, el 15 de septiembre.

El 16 de septiembre de 1910, desfilaron 5 mil soldados con uniforme de paño azul.

En 1911 se organizó un desfile y un festival militar en el Hipódromo Condesa, con carreras de caballos conmemorando la consumación de la Independencia.

Durante el desfile, los soldados de infantería presentaban maniobras militares y los jinetes de caballería brindaban un extraordinario espectáculo ecuestre.

El objetivo de dicha celebración, es preservar el recuerdo del día en que se inició el movimiento libertario y el reconocimiento a sus iniciadores.

A partir de entonces, en todo el país se celebra el 16 de septiembre como fiesta patria, a excepción de 1847, en que México estaba invadido por los norteamericanos.

Desde el punto de vista de la ordenanza militar, un desfile sirve para que las autoridades civiles y militares pasen revista de las tropas, para que se rindan honores a los elementos vivos o muertos que lo merezcan.

Tanto el cuerpo de Caballería del Pentatlón, como los cadetes de Caballería del Heroico Colegio Militar, iniciaron con la costumbre de aumentar la dificultad y espectacularidad de sus actos.

En la década de los 50, se incluyó en los desfiles militares el sobrevuelo de naves aéreas de la Fuerza Aérea Militar-Colegio del Aire.

Desafortunadamente, el 20 de noviembre de 1995 cinco naves aéreas colisionaron en el aire y varios pilotos aviadores fallecieron, por lo que se suspendió por 12 años, la participación de naves durante los desfiles.

El 16 de septiembre de 2007, se tomó la decisión de que las naves de la Fuerza Aérea mexicana de nuevo surcaran los cielos.

Para este 2013, participaron agrupamientos de 18 países que serán parte de los festejos del 203 Aniversario de la Independencia y del Centenario del Ejército Mexicano.

Para el espectáculo aéreo se cuenta con una flota de 90 aeronaves de la Fuerza Aérea.

Además se presentó por primera vez la Gendarmería Nacional, que será conformado por 10 mil elementos de la Marina y del Ejército.

Martha Rodríguez

Historia del festejo del Día de la Independencia de México

Es el festejo más importante de los mexicanos.

Fervor patrio, luces, música, una verdadera fiesta  para recordar la lucha que inició el 16 de septiembre de 1810.

La independencia de México se consumó en 1821, sin embargo ya desde 1813 se había reconocido en uno de los documentos más importantes de la historia del país.

“Fue desde Los Sentimientos de la Nación, esté documento que leyó Morelos en el Congreso Chilpancingo de 1813, se solemniza ya el 16 de septiembre como el día en que se inició la lucha por la Independencia”, Cristina Gómez Álvarez, Directora del Museo Nacional de Historia.

Sin embargo, el Día de la Independencia no se conmemoró inmediatamente después de su consumación, debido a que México inició su vida independiente como un imperio.

En la Constitución republicana de 1824 se reconoció también el 16 de septiembre como el día en que inició la revolución de independencia.

Durante todo el siglo XIX se empezó a festejar el Día de la Independencia de forma intermitente,  porque en ese tiempo se realizó invasión norteamericana y después la Intervención Francesa.

“De tal manera que va a ser ya en el Porfiriato donde año con año se festeje este día en la Plaza de la Constitución de la Ciudad de México principalmente, pero también en las plazas más importantes de los estados de la República”.

Fue el presidente Porfirio Díaz quien ordenó traer a Palacio Nacional la Campana de Dolores, que tocó el cura Miguel Hidalgo la madrugada del 16 de septiembre de 1810.

“Desde entonces Porfirio Díaz escogió el momento del festejo la noche del 15 por qué, porque era día de su cumpleaños y esa tradición ya se nos quedó hasta la época actual, a pesar de que el día de descanso obligatorio es el 16 de septiembre”.

Actualmente el 16 de septiembre es el día en que las Fuerzas Armadas realizan el tradicional desfile que da continuidad a las fiestas patrias por el inicio de la Independencia.

Juan Carlos González 

Ceremonia del Grito de Independencia

Momento cumbre del recuerdo del inicio de la libertad y del nacimiento de México.

Desde el balcón de Palacio Nacional, el Presidente Enrique Peña Nieto, por primera vez en su mandato, encabezó la Ceremonia del Grito de Independencia.

El Ministro Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Juan Silva Meza, estuvo presente en esta Ceremonia del CCIII Aniversario de la Independencia Nacional.

Tras la invocación de los personajes que dieron origen a la identidad patria, resonó la campana y el Himno Nacional.

A pesar de la lluvia, miles de personas acudieron unas horas antes al Zócalo capitalino para festejar.

Entre pelucas, rebozos, pinturas y bigotes, todos bailaron, gritaron y cantaron la libertad nacional.

Para la vigilancia en el primer cuadro de la Ciudad participaron elementos del Estado Mayor Presidencial, la Policía Federal y efectivos de la Secretaría de Seguridad Pública capitalina.

Y se colocaron filtros de seguridad en los accesos a la Plaza de la Constitución.

Al final de la ceremonia las autoridades reportaron saldo blanco.

Mario López Peña