El Programa Universitario de Derechos Humanos de la UNAM presentó una propuesta para restablecer el Estado de derecho en las prisiones del país.
El estudio estuvo encabezado por Sergio García Ramírez, del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, quien calificó como dantesca a la corrupción que hay la mayoría de las cárceles mexicanas.
Aseguró que muchos reclusorios son verdaderos mercados de la miseria humana.
“La corrupción que prevalece en las cárceles es inconmensurable, siguen siendo muchas de ellas lugares de mercado para todos los bienes en que se ha puesto bajo tarifa todo: la vida, la integridad, el alimento, el sexo y la esperanza de una vida mejor”.
Propuso restablecer el Estado de derecho en las prisiones, a través del combate a la corrupción, la capacitación de todo el personal penitenciario y poner límites a la prisión preventiva.
“Lo que tenemos que hacer ante todo es restablecer en Estado de Derecho en las prisiones y restablecer también los derechos de los que hay que hacer uso en las prisiones, derechos que abarcan también a los custodios”.
Señaló que se debe barrer todo lo malo que hay en los reclusorios, sin concesiones y sin disimulo.
El estudio propone elaborar programas, diseñar espacios y aplicar recursos que favorezcan el trabajo, la educación, la salud, el deporte y los derechos humanos.
Además, atender las necesidades en materia de alojamiento, alimentación, ropa y medicamentos que permitan una verdadera reinserción social de los sentenciados.
“Nuestro propósito es que las autoridades conozcan estos trabajos y que en algún momento tengan la posibilidad de poner es práctica lo que en estos trabajos se sugieren”, Luis de la Barreda, Coordinador Programa Derechos Humanos UNAM.
En todo el país hay más de 400 prisiones, con cerca de 240 mil internos que se encuentran en condiciones de sobrepoblación.
Juan Carlos González