Los hermanos Chérif Kouachi, de 32 años y Said Kouachi, de 34, son los enemigos públicos número uno en Francia.
Fueron entrenados en Yemen y tienen antecedentes penales por cooperar con redes yihadistas.
Durante la cacería humana en París, agentes hallaron el coche abandonado donde escaparon los atacantes y fueron encontradas 12 bombas.
El tercer sospechoso, Mourad Hamyd, de 18 años, se entregó a la policía en la madrugada de este jueves en la localidad de Charleville-Mézières, junto a la frontera con Bélgica, tras haber visto su nombre en las redes sociales.
Nueve personas relacionadas con los atacantes han sido detenidas en las últimas horas.
“Tuvimos una actualización de la situación con el presidente, la búsqueda seguirá en curso para detener a los individuos que cometieron el crimen de ayer, para discutir la seguridad que les debemos a nuestros conciudadanos.”, Manuel Valls, Primer ministro francés.
En 2013 Al Qaeda publicó una lista con nueve nombres de sus enemigos más buscados entre los que estaba Stéphane Charbonnier, director del semanario Charlie Hebdo, una de las 12 personas asesinadas en el atentado.
Francia informó que continuarán los operativos de seguridad y mantendrán la alerta antiterrorista.
“Frente a una amenaza terrorista tenemos que actuar y estamos actuando a nivel de la policía, los servicios de inteligencia y en el ámbito judicial.”,
En las calles de Francia las muestras de rechazo y luto continuaron y se extendieron a Alemania, Ámsterdam, Brasil, Estados Unidos, España, Inglaterra y Tokio, entre otros.
En señal de luto, banderas tricolores francesas se izaron a media asta en todo el país y la Torre Eiffel apagó sus luces.
Los parlamentos de Francia, España, Italia y gran Bretaña guardaron un minuto de silencio.
Lorena Sánchez Cabrera