México debe abandonar el proyecto de energía nuclear que está siendo impulsado por algunos grupos, a pesar de la emergencia que se está viviendo en Fukushima, Japón.
Así lo exigieron académicos y representantes de organizaciones civiles, quienes aseguraron que es falso que la energía nuclear sea una alternativa eficaz para enfrentar el cambio climático.
“Es totalmente falso lo que dicen esta nucleocracia que hemos escuchado en las últimas 48 horas de que nuestra solución, la solución del cambio climático está en la energía nuclear, no reduce el gas de efecto invernadero, contribuye muy poco a sustituir estos combustibles fósiles, llegan tarde y es extremadamente caro”, Gustavo Ampugnani, Dir. de Campañas Greenpeace México.
Explicaron que hay proyectos para construir en México hasta 10 plantas nucleares, que se sumarían a las dos que actualmente operan en Laguna Verde, Veracruz, donde, aseguran, se han presentado irregularidades.
Denunciaron que México no está preparado para enfrentar una emergencia como la que se vive en Japón.
“Sólo pensemos en cómo nos pegan los huracanes o las inundaciones en nuestro país y evaluemos qué tan preparados estamos… Y uno se puede imaginar qué tanto podríamos estar preparados para un accidente de este tipo. No lo estamos, o sea México es un país muy vulnerable”, Gustavo Ampugnani, Dir. de Campañas Greenpeace México.
Los especialistas informaron que en caso de que se agrave la emergencia en Fukushima y se fusione el núcleo de algún reactor podría generar una emisión masiva de material radiactivo que incluso podría afectar a nuestro país.
“Si hay una explosión como la que teme mi amigo Negrete esa pluma radiactiva podría ser arrastrada por esa corriente de chorro y llegar rapidísimo no sólo a Canadá y Estados Unidos sino también a México… Es gravísima la posibilidad, es cuestión de horas”, Eduardo Rincón, Experto UAEM.
Explicaron que sólo se trata de una posibilidad, ya que es difícil precisarlo por la información incierta que ha proporcionado la compañía que opera la planta nuclear japonesa.
Juan Carlos González