El nuevo modelo de justicia penal deberá estar operando de manera plena en el año 2 mil 16; sin embargo, a 3 años de la aprobación de la reforma constitucional que le dio origen, comienzan a vencer algunos plazos que fijó el propio Congreso de la Unión, para su implementación paulatina.
“Es urgente el rubro del nuevo sistema de reinserción y el régimen de ejecución de sanciones; el término se cumple en uno 10 días, 12 días aproximadamente, es necesario que las entidades definan cuanto antes las estrategias correspondientes, debido a que la constitución, estableció un plazo de 3 años, siendo este el 18 de junio del presente”, Felipe Borrego Estrada, Srio Técnico del Consejo Coordinador para la Implementación del Sistema de Justicia Penal.
La capacitación de policías y ministerios públicos, un nuevo código de procedimientos penales, los medios alternativos de solución de controversias y definir si todos los asuntos penales se resolverán por la vía penal, son algunas de las tareas pendientes en esta materia.
“Yo creo que, deberíamos de entender que hay delitos de bagatela y pasar a lo que se conoce como los juicios rápidos y los juicios rápidos deberían de concluirse en lo que las experiencias internacionales nos marcan, quizá en 48 horas, resolverlo y se acabó”, Miguel Ángel Mancera, Procurador General de Justicia del D. F.
Paralelamente, el sistema penal acusatorio, deberá acompañarse de un plan integral de atención de las adicciones y las secuelas, que ello genera.
“Y nos obliga a repensar las políticas de tratamiento como un mecanismos de prevención, no nada más del desarrollo del problema y de los problemas sociales que implique el ser adicto a una sustancia, sino también a la violencia que obliga a los adictos a para poder conseguir la droga”, María Elena Medina Mora, Directora General del Instituto Nacional de Psiquiatría.
Se reconoce que el juicio oral no tiene como fin reducir los índices delictivos, sino agilizar y transparentar la impartición de justicia.
José Luis Guerra García