El manejo sustentable del agua es esencial para su desarrollo, de ahí que las políticas públicas deben estar orientadas a su conservación y cuidado, advirtió el Ministro de la Suprema Corte, Sergio Valls Hernández.
Durante el IX Seminario Derecho Constitucional Tributario en Iberoamérica, destacó que los instrumentos fiscales son clave para incidir en el mejoramiento de los recursos hídricos.
“El reto de las autoridades mexicanas es garantizar que los usos que se den al agua no comprometan su acceso, su disponibilidad, su calidad para las generaciones presentes y futuras”.
El ministro Valls participó en la mesa “La tributación por el aprovechamiento del agua”.
Explicó que la Suprema Corte ha fijado criterios para el legislativo establezca el cobro por el uso, aprovechamiento y explotación del recurso natural, además del servicio de agua potable.
Entre los parámetros está la zona de disponibilidad, la cantidad de agua que se utilice, el uso que se le dé y el costo ambiental que el estado tiene que invertir.
“Que los usos que no causan daño al agua, deben ser diferenciados de aquellos que sí causan daño al agua, por lo que ante esa circunstancia se justifica el trato fiscal diferente al contemplar tarifas distintas ya que se pretende racionalizar la extracción del agua del subsuelo”, Sergio Valls Hernández, Ministro de la SCJN.
Para fijarse los montos del derecho por el agua se toman en cuenta el hecho de que es un recurso vital y su disponibilidad se encuentra limitada.
“Deben incorporar variables extra fiscales que incidan en la toma de decisiones de los contribuyentes, internalizando conductas negativas y cambiando patrones de comportamiento como la contaminación y el uso desmedido del agua, situación que ocurre actualmente al establecerse el cobro diferenciado del agua”, Sergio Valls Hernández, Ministro de la SCJN.
La Suprema Corte de Justicia determinó que es válido el cobro diferenciado por el agua y que este no viola los principios tributarios de equidad y proporcionalidad.
Martha Rodríguez